Tutorial de Escenoagrafía: Fortaleza vikinga

Hoy os traemos un fantástico tutorial que Daniel Bernanrdos (del blog Bernar2on) ha querido compartir con nosotros, no os la pedáis. es una chulada ....

FORTALEZA VIKINGA 

by Daniel Bernanrdos

Buenos días blogeros, parece que este año va de cumplir sueños, y es que tras conseguir por fin tener una mesa de juego fija en casa, me he lanzado a hacer una fortaleza para tener en la misma y, con suerte, algún día jugar un escenario de asedio. Sin exagerar tener mi propia fortaleza para wargames es algo que llevaba mucho tiempo queriendo, de hecho la famosa fortaleza de GW debe andar metida en alguna caja en casa de mi madre esperando su momento. Manos a la obra lo que parecía una utopía se erige ya orgullosa sobre el cesped ferroviario, vamos con el paso a paso.

Lo primero que vamos a hacer es pensar detenidamente lo que queremos construir y para ello hay que buscar inspiración. Buceando en internet me topé con estas imágenes y me lancé a por ello.

El segundo paso sería elegir las medidas. En mi caso me decidí por hacer un elemento mas o menos grande, pero que pudiera mantener en la mesa aún cuando el juego no le diera un papel principal y, aprovechando que el tablero lo hicimos de 110x120 (90x120 es la medida de saga), decidí que lo mejor era crear una pieza que pudiera ponerse en una esquina. Las fortalezas vikingas tenían forma circular, por lo que esa zona esquinera le iría perfecta, además la idea era hacerla por modulos, por lo que mas adelante puedo añadir secciones y así utilizarla como un elemento más central.

Una vez que tenemos plasmado todo este cacao cerebral en el papel, algo que siempre viene bien para tener una referencia sobre todo en proyectos grandes, llegó el momento de empezar la construcción.

Lista de materiales:

• Madera.
• Poliestireno: en este caso vamos a utilizar dos planchas de 5cm de grosor.
• Palitos de dos medidas: de 5mm para la parte baja de la muralla y palos de pincho moruno para la de arriba (mejor sin usar, que si no huelen).
• Cartón pluma.
• Goma eva con relieve.
• Madera de balsa.
• Corcho (del de los tablones de poner tus fotos de teenager).
• Cola blanca.
• Arena.
• Agua.
• Pinturas.
• Tela de pelo.
• Cesped ferroviario.
• Cervezas (hay que cuidar la hidratación).
• Cartón fino.

En primer lugar marcamos en el poliestireno la forma que van a tener nuestras murallas y lo cortamos. En nuestro caso lo hicimos directamente con las dos planchas de poliestirno ya unidas entre sí, lo que dificulta el corte pero ayuda a que la forma quede más exacta. Dejamos una parte plana en la parte superior de 35mm y cortamos dando pendiente a ambos lados, con una pendiente muy pronunciada en la cara exterior y menos en la interior. Además añadimos un escalón de 5mm en la parte externa.

Una vez que tenemos hecha la forma básica de las murallas vamos a recortar una base en madera (puedes usar el material que quieras en este punto). Mientras se pega vamos a empezar a construir la "casa" que hará las funciones de puerta.

Lo primero que vamos a hacer es dibujar en papel milimetrado las diferentes piezas de nuestra casa. Una vez las tenemos colocamos este sobre una plancha de cartón pluma y clavamos unos alfileres en las esquinas. Unimos los puntos con un rotulador y ya tenemos perfectamente nuestros planos en el cartón (perfectamente salvo que seais unos manazas como yo que siempre me queda alguna pieza deforme, pero me gusta pensar que eso le da un toque realista).

Recortamos y pegamos las piezas sobre la goma eva que es lo que va a dar el relieve a nuestra casa. Otra opción es marcar sobre el cartón pluma con un punzón o cúter, pero si encuentras goma eva con un grabado similar al que quieres no lo dudes. Para acelerar el proceso hemos utilizado loctite en vez de cola blanca ya que se pega mucho más rápido.

A recortar otra vez y a unir las piezas. Para añadir detalles utilizamos el sobrante de los palos de la muralla (eran de 15cm y nosotros solo necesitabamos 10cm) para las uniones de las piezas.

Añadimos unos listones de madera de balsa para dar más detalles a la casa y dejamos esta parte lista. Aprovechando que la base de las murallas es blanda hacemos unas hendiduras del mismo grosor que la base de la casa para que encaje en ellas. Esto nos ayudará a darle estabilidad al elemento pero sin dejar de ser desmontable, algo que se agradece a la hora de guardarlo.

Para el tejado cortamos de una caja de cereales un rectángulo y lo doblamos por la mitad. Añadimos un detalle en madera de balsa al frente del mismo y pegamos el pelo con cola blanca.

Cuando seque vamos a darle un baño de cola blanca y agua al pelo peinándolo hacia abajo.

Dejamos la casa a un lado y empezamos a pegar los palitos de 5mm en la zona exterior de la muralla con cola blanca. Una vez estén todos pegados y secos damos una mano de cola blanca y agua por encima para que ganen consistencia y pegamos los palos mas finos en la parte superior siguiendo el mismo proceso.

De haberlo pensado antes lo hubiéramos hecho pero nos dimos cuenta de que iba a ser más sencillo tallar las escaleras que fabricarlas, así que manos a la obra. Tan sencillo como hacer pequeños cortes con el cúter en el poliestireno.

Con las murallas terminadas vamos a darle una mezcla de cola blanca, agua, arena y pintura negra y dejamos que seque bien. Nosotros solemos dejarlo secar al menos 12 horas, tras lo cual aplicamos otra vez pero sin la arena, solo agua, cola y pintura, para darle consistencia.

Mientras seca nuestro mejunje vamos a terminar la casa. Con trozos de los palos de 5mm vamos a hacer unas columnas. No son necesarias pero con más apoyo damos estabilidad a la pieza. En nuestro caso utilizamos tres palos unidos en cada lado. En este momento vamos a hacer también las escaleras. Cogemos madera, la misma que hemos utilizado para la base y hacemos dos rampas. Sobre ellas vamos a pegar tiras de corcho de 1cm de ancho. Una vez queden a nuestro gusto les damos un baño de cola blanca y agua.

Con esto terminamos la parte de construcción. Comprobamos que todo ha quedado correcto y pasamos a la fase de pintado, aplicando una capa base con sprays (nosotros utilizamos montana). Cuidado, si dejas zonas sin tapar del poliestireno el spray las destroza, por lo que tienes dos opciones, dar la capa base con pincel o dar una capa de cola blanca y agua en esas zonas. Esto crea una fina película que protege el material.

Ya solo queda pintar la estructura a tu gusto. Nosotros utilizamos para las murallas y la casa diferentes tonos de marrón, nuestra ya conocida combinación de grises para la tierra y para el tejado la misma combinación de marrones que para la casa y murallas pero partiendo del segundo tono y añadiendo unas últimas luces más claras.

Pegamos el césped y listo. Nuestros vikingos ya tienen un hogar que proteger.

Seguro que os ha encantado, y es mas facil de lo que parece inicialmente ....

Un saludo, Chuchosky